15.5.10

Comenzar de nuevo / Otra vez avanzar

Sí. Sí lo sé.

Dije que cerraba el blog. Que los blogs eran un despropósito... A no ser que...

Pero eso ya está; y ya fué.

Comenzé de nuevo. Pero de blanco, pasé a negro; y de verde y naranja, a azul claro (no celeste) y naranja. (Me acabo de acordar de que tenía en el colegio, en 2° Básico, una profesora que en lugar de azul, decía "azulino". Allá ella. Cada uno es dueño del lenguaje.)

Así que les invito.

Y si son personas con mucho tiempo en la vida, o simplemente con mucha curiosidad y ganas de leer, o son rayadas por lo conceptual, y le buscan raíces conceptuales hasta a los postes de la luz, como yo, podrían embarcarse en la tarea, no sin sentido, de leer este querido Blog desde el comienzo, y de ahí tirarse con el otro. Y si son del último grupo, el de los conceptuales rayados, que no necesitan que les digan donde están los trazos, sino que se los inventan o los sacan sin necesidad de usar el manual del usuario que viene en cinco idiomas, me cuentan después cual fue su análisis, y nos reímos juntos. (Esto último, sino lo entiendes, coge consuelo, que no es para cualquiera).


Un abrazo.
David Rodríguez.

¡Y aquí va la dirección!

"El Tractat de un Valontrada <-------------------------------------------------------------------

Abrazos!
Besos!
Y Paz!

:D

30.1.09

La verdad sobre los blogs - El fin de este blog

Pensamiento radical: los blogs son una estúpidez a no ser que tengas algo muy bueno que decir. Osea, si no tienes algo importante para decir... ¡Joder! ¡No te hagas un blog!

Eso pensé, y mi pensamiento se me devolvió como un boomerang y me golpeó directo en la cabeza. Si pesco una libreta y escribo, soy más sincero que en esta lesera. Me puse a leer toda lo que he escrito aquí, y francamente me dio vergüenza; y no esa clase de vergüenza que la da a uno cuando tus amigos descubren que todavía duermes con un osito de peluche, sino que esa vergüenza que se siente cuando has hecho algo realmente malo y tus actos te encuentran y te condenan. Patético, falsamente sentido, una sucia máscara. Francamente los blogs que tienen como protagonista al que escribe me apestan; blogs llenos de pensamientos, de frases bonitas, de análisis de la vida, de historias aburridas. Y el mío es uno de ellos, sólo que yo lo hago parecer más literario, lo disfrazo, lo maquillo.

¿Dónde está el conflicto? ¿Dónde está la emoción?

Un blog ni siquiera puede usarse para ver la forma en que una persona ve la vida. Los diarios de vida no entregan un panorama claro de como las personas ven la vida, porque quien lo escribe inevitablemente se imagina que alguien lo leerá algún día quizá cuando ella muera; en palabras de García Quintana siempre existe un afán de trascendencia. Y si con los diarios privados es así, ¿Qué podemos esperar de una bitácora publicada en Internet donde el que escribe sabe que todo el mundo la podrá leer? ¿Podemos esperar que una persona nos despliegue en un blog sus más sinceros pensamientos sin que estén trastocados por la necesidad de ser rentables e interesantes? Y lo más importante, a ti personalmente, ¿Te interesa lo que cualquier fulano piensa de las cosas? Porque hoy en día cualquiera se hace un blog y escribe pelotudeces; a mi me interesa lo que tiene que decir alguien que admiro o que sé que opina sobre asuntos interesantes de forma ingeniosa e inteligente, no lo que opina alguien por ahí simplemente. Por eso están las encuestas: las encuestas miden lo que opinan las gentes sobre un tema objetivo mediante una preguntra objetiva; pero son solamente los más craneados y los que tienen algo inteligente para decir los que publican sus columnas en los diarios que la gente lee, y logran influenciar a otros con su punto de vista.

Se acabó, como no tengo nada más trascendental que decir que a ustedes (sí es que alguien lee) les pueda interesar, me retiro y me despido después de casi tres meses de no escribir y dedicarme a madurar esta idea. Muchas gracias a todos los que me leyeron alguna vez, a los que dejaron mensajes, a los que se molestaron con lo que escribí, a los que confiaron en mi y me pidieron que revisara sus escritos, a los que me dijeron que me faltaba mucho por aprender, a los que me felicitaron y a los que me dieron tema. Un agradecimiento especial para el escritor Saúl Schkolnik que me inspiró con un simple saludo a escribir, y a la escritora Alicia Morel por sus libros que han sido los únicos que me han hecho soñar, y que no la defraudaré con lo que me dijo de ser primero rico en espíritu. Y claro, por supuesto, el más grande y cariñoso abrazo para mi primer autor: Else Homelund Minarik.

El blog seguirá abierto por si alguien quiere dejar saludos o comentar algo viejo. Todo lo que comentan se me avisa por mail, así que aún sigo aquí... después de todo, algún día tendré algo que decir que valga la pena. Este cierre es temporal, pero un poco más prolongado de lo normal entre entrada y entrada. Adiós, fue un gusto y un honor que me leyeran. Este 2008 fue diferente gracias este blog. Chaooooooo. Ahora me dedico al cuento y a la novela.

David Rodríguez

15.11.08

Paula Jiménez

Así es. Hace años que la busco. Su nombre es Paula Jiménez y está en algún lugar de esta ciudad o de otra. Ella fue mi compañera de curso en 1º Básico, y aunque parezca raro, no he logrado olvidarla aun. Varias veces, en estos casi ocho años que has transcurrido desde que la ví por última vez, me he topado con personas que me dicen que conocen a una Paula Jiménez con las características que yo les doy, pero que al final solamente son parecidas o son simples bromas de los niños que conocí en los tantos colegios en los que he estado.

Nunca me olvidaré de la primera vez que la ví: estaba tan linda con su buzo del colegio. Recuerdo que me quedé pegado mirándola. "Me llamó Paula", dijo; y su nombre se quedó grabado en mi corazón. El impacto que tuvo en mi infantil mentecita, el ver a esa niña moverse como una flor, me mantiene en la búsqueda desde entonces. Con los años la Paula se fue convirtiéndo casi en un fantasma: un hermoso recuerdo que me trae a la memoria cientos de imágenes de ese primer año en el colegio. Es también ahora ella como una leyenda: es la niña perdida que se resiste a ser encontrada y que al parecer nadie más recuerda aparte de mí.

Todavía no pierdo las esperanzas de encontrárte. Se que estás en algún lugar de este inmenso mundo. Pero ni Facebook ni Google me responden cuando escribo tu nombre insistentemente, y ya no sé donde más buscarte.

La Paula Jiménez que yo busco debe responder afirmativamente a esta descripción de recuerdos entrecortados: estuviste en el Colegio Maya School en 1º Básico y luego te fuíste. Tenías en ese tiempo el pelo castaño claro y tu segundo apellido recuerdo que es bastante raro porque nunca me lo pude aprender (y no es Valverde). Tu mamá tenía en ese tiempo (Año 2000) el pelo negro, liso y largo, y si no me equivoco, como trenzitas con cuentas de colores, aunque mis recuerdos de infancia me pueden estar confundiendo. Tengo la ligera impresión (y espero estar equivocado) de que tus papás estaban separados...(No tomes mucho en cuenta este punto, porque es el más vago e todos). Nuesta profesora jefe era la Tía Marisol y algunos nombres de tus compañeros eran José Ignacio Bustamante, Diego Muñoz, Macarena Córdoba y Anaís Puig entre otros.

Por favor, si eres tú o si conoces alguien así, necesito encontrar a ese fantasma del pasado. Necesito saber que eres real; que la niña que ha vivído en mi memoria todo este tiempo existe. Nada más, no busco nada más. Solo saber si vives, porque parece que sólo yo te recuerdo.

Estoy escribiendo al lado de una mesa de sonido y son en este momento las 3:34 AM. No tengo sueño, pero el cuerpo me está pasando la cuenta: tengo las piernas y los brazos molidos. ¡Carpe Diem!

David Rodríguez

21.10.08

Un Mèlange (II)

Esta es la continuación de "Un Mèlange", la entrada que comencé a escribir sin esperanza y que terminé de escribir asqueado. Por supuesto, jamás me imaginé que esa cosa rara que escribí iba a tener una secuela... pero aquí está.

No me gusta volver a leer lo que he escrito hace poco, porque típico que uno lo encuentra muy malo y se arrepiente de haber escrito semejante cosa; solamente los releo una vez terminados para corregirles la ortografía. Pero con "Un Mèlange" me pasó algo distinto: como cuando lo terminé de escribir tenía una percepción tan negativa de ese insípido texto, que cuando lo leí de nuevo, me pareció más o menos decente. Y no es que esté teniendo un lapso de humildad extrema, de verdad las cosas que escribo son muy malas; y por eso precisamente es que escribo: para tener más posibilidades de que algún día, alguien que de verdad sepa valorar un buen escrito, diga: "De verdad, en este libro, Rodríguez supo captar y transmitir la esencia de lo que habló".

Otra cosa que he observado en esto de la escritura es la importancia del estilo propio. He conocido distintos personajes de mi edad que no son más que repliquitas de Cortázar o Tolkien. No escriben desde ellos mismos, sino que tan sólo están reemplazando la historia original de un libro que les gustó, por una mucho más simple, básica y pobre. Como los que escriben con Harry Potter como base...

Es cierto que existe la influencia; que si yo leo mucho a un autor, y ese autor me agrada, lo más probable es que mis escritos tengan un toque muy Carlos Cuauhtémoc Sánchez, o muy Sábato, o muy Borges, etc. Por lo general, una persona que acostumbra escribir, a leído más que el común de las personas, por lo que es imposible que a la hora de escribir no haya algo de influencia externa: porque hemos leído, es que sabemos escribir.

El secreto está en romper eso, en romper con la copia de estilos, con la falta de autenticidad, con la escritura que viene de lo leído, y no de lo vivido. ¿Y cómo se hace eso? Yo siempre he creído que la mejor forma de hacer que una persona quiera aprender algo que le puede resultar tedioso, es haciéndole ver los beneficios prácticos y cotidianos que le traerá el aprender eso. La comunicación la usamos más seguido que las matemáticas. A mi me gustan las matemáticas, pero lo innegable es que si en un colegio cualquiera se imparten excelentes clases de Física, Matemática, Química, Biología, Historia, Filosofía, etc, pero no se le está poniendo real énfasis a que los alumnos aprendan a comunicarse correctamente, a hablar bien, a escribir como se debe y a escuchar al otro, todo lo demás cae en saco roto.

Todos nos comunicamos, pero cada vez lo hacemos peor. Eso va en desmedro de las relaciones humanas, de la claridad para entendernos y de toda nuestra sociedad; abre paso a la violencia como método para solucionar los conflictos y al ocaso del diálogo respetuoso. Es prioridad la comunicación, antes que cualquier ciencia y cualquier tecnología.

No me malentiendan. Reconózco la importancia crucial que tienes las otras áreas del conocimiento; pero creo que inculcar la buena comunicación debe ser prioridad. Si esta está bien arraigada en nuestros corazones y en nuestro modo de actuar, el hombre podrá, durante toda su vida, comprender más fácilmente las interrogantes que la vida le irá dando.

David Rodríguez

15.10.08

Un Mèlange (I)

Si tengo algo que agradecerle al sistema educacional de mi país, que me ha tenido prisionero los últimos nueve años de mi vida, es que me ha dado un tema del cual escribir.

Me he ido dado cuenta, a través de los años, que cada escritor, es "el escritor de algo". Por ejemplo, Michel de Montaigne es considerado el padre del ensayo; Freud, Marx y Nietzsche, son llamados los fundadores del discurso; y Jean Marie Gustave Le Clèzio, ganador del Nobel de Literaura este año, fue descrito por la Academia como "El escritor de la ruptura, de la aventura poética y de la sensualidad extasiada, investigador de una humanidad fuera y debajo de la civilización reinante".

Muchas veces empezé a escribir, en algún cuaderno que destinaba para mis textos varios, pensando que era el "escritor de algo", inventándome un personaje. Me gustaba la idea de escribir enayos. Me sonaba interesante la simple acción de escribir mi punto de vista sobre un asunto determinado.

Después de varios intentos fallidos, empezé a preguntárme el para qué escribía. Era una pregunta mucho más real y cercana que un "¿Para qué vivo?" Escribo a pesar de que me cansa, a pesar de que me retan por hacerlo en clase, a pesar de que prefiero jugar fútbol antes que sentarme a leer. Comenzé a ver que muchos escribían, algunos adolescentes que acostumbraban tener sus cuadernos, hacer sus poemas y tener sus blogs donde publicaban sus trabajos.

Nunca me ha gustado eso. Yo no disfruto mucho de escribir, pero es una de las cosas que más hago. Muchas veces, cuando escribo a la salida del colegio mientras espero a mis amigos, suele llegar alguien que me pregunta "¿Te gusta escribir?"... Ni siquiera me acuerdo de lo que respondo; pero me cansa esa pregunta, "No, estoy haciendo una cosa", me parece que digo: la mejor forma de evadir lo que sea.

La mayor parte de las personas, en nuestra sociedad chilena, saben escribir; si tantos sabemos escribir, entonces, ¿Qué diferencia a una simple persona de alguien llamado escritor? Si la diferencia esta en la cantidad, ¿Cuál es el número de mínimo de letras escritas que debo tener para ser considerado un escritor? Y si la diferencia es la calidad, ¿Quién juzga eso? Y si la diferencia es el nivel de conocimiento público o de interés colectivo por la obra, entonces, ¿Un autor que nunca publicó sus escritos, no es escritor por eso?

No lo sé. Tendría que escribirlo todo ordenado para entenderlo. Lo que sí sé, es el porque escribo: escribo porque lo necesito; escribo porque si no lo hiciera se me olvidaría lo que voy razonando.

El otro día estaba escribiendo en la cancha del colegio. Me paseaba de un lado a otro del patio intentando ordenar mis ideas: estaba escribiendo un ensayo sobre la redacción. "¿Qué son la escritura y la redacción?" se llama. Mientras lo escribía, vi a la Profe Karina. Me pregunté si ella, que ahora es profesora de lenguaje, alguna vez se habría hecho las mismas preguntas que yo.

Algunos escalan por la vía bohemia, el teatro y la literatura; otros por la vía filosófica, las preguntas y la búsqueda de las respuestas. Bohemios y Filosóficos: admiro a los profesores que van por los dos lados.

Aaaaah!!! ¿Qúe estoy haciendo? Esta cosa es demasiado larga. No la voy a cortar porque invertí mucho tiempo en esto. Nunca logré hilar bien las ideas. Bueno, lo siento.

Esto lo debí haber escrito en mi cuaderno, no aquí.

Ya está hecho.....Carpe Diem....

Adiós.

David Rodríguez

31.8.08

La Cuchara Relativa

Mientras me lo contaba, me repetía interiormente que debía de ser fuerte. A mí, aparentemente, no me tendría porqué afectar tanto; pero estaba tan acostumbrado a que las cosas marcharan de cierta forma... y esto de seguro cambiaría radicalmente la normalidad que me (nos) acomodaba.

Repetí una y otra vez durante la noche la canción "Soñando en Colores" del Berguño (Un Oír), intentando poder impregnarme un poco de esa esperanza.

"La cuchara es relativa". Esa extraña afirmación que un día le dije- "No, no tiene ningún sentido", afirmó. Pero es que es verdad: todos sabemos que las cucharas o ponen o sacan... pero nadie sabe cuando, ni que, ni cuanto. Esta vez esta ha estado sacando hace un buen tiempo; lo que fue sacó nuestra preciada y normal unidad; y nos quitó suficiente como para traspasar la barrera de la incomodidad general pero inconsciente.

La cuchara relativa tiene otra particularidad: al sacar lo que está encima, permite ver lo que ha quedado más abajo, por años quizás. Y tiene otra propiedad más: la cuchara no solo sirve para poner y sacar... también sirve para revolver; y al revolver, eso que formaba grumos en el fondo, se suelta, se disuelve, y al mezclarse y colorear el agua se hacen evidentes las cosas que estaban escondidas.

Pido perdón por este texto tan poco claro e interno. Es tan profundo, incluso para mí, que solo lo comprendo a cabalidad releyéndo cada línea, y siendo cuidadoso de "las otras lecturas". Saquen de él lo que puedan sacar.

En fin: Os quiero. Os amo. Os adoro.

P.D.: Este no suele ser mi estilo, (o, al menos, procuro que no lo sea). Son las 3:46 AM y todo cambió hace muy poco. Espero poder entregarles un texto decente dentro de poco. ¡¡Gracias!!

David Rodríguez

26.7.08

¿McVanRod? ¿Pero porqué McVanRod?

No puedo dejar que termine el presente mes de Julio sin escribir alguna cosa antes. Dejé pasar los días del mes en los que la inspiración estaba dispuesta a echarme una mano, y ahora estoy aquí solo escribiendo a la deriva. Ella no volverá hasta Agosto.

Sin embargo, si no escribí antes, no fue por ningún malviaje ni por un descuido. Estaba listo para fabricar algún texto, justo en los días que siguieron a MOU; y no me gusta escribir justo en esos momentos en que mi ánimo anda por las nubes. Prefiero esperar a que las cosas marchen con toda normalidad para que mi escritura sea lo menos trastocada posible por las emociones.

Mmm... Sinceramente, no se me ocurre nada.

Ya. Ya sé. He recibido algunos comentarios que se refieren al porqué de que este blog se llame McVanRod, siendo que soy el único que escribe aquí. Bueno, las cosas sucedieron más o menos así: Una noche de Diciembre, me encontraba en una especie de vigilia con los jóvenes de la iglesia de mi mamá. Yo tenía el notebook en frente mío, y como suele suceder a las 4 de la mañana, no había nadie conectado en MSN (y por aquellos tiempos Facebook, era algo desconocido para la mayoría). Yo era dueño de un blog bastante malo, y hacía ya meses que no escribía en él. Mi amigo Roy se encontraba en Sudáfrica y con el Rodrigo estábamos peleados. Yo por mi parte estaba preocupado por la unidad de nuestra amistad. Así que se me ocurrió la brillante idea de crear este blog. Y allí, en la soledad de la noche, cree a McVanRod.

McColl + Van Der Westhuizen + Rodrigo = McVanRod


Mi idea en un principio, era que los tres metiéramos mano en el asunto. Pero no es que me halla fallado la intención, lo que pasa es que el Rodrigo no es tan dado a escribir (la verdad, no sé como lo hace, pero algún día lo descubriré); y el Roy, que conozco como escribe y estoy seguro que sería todo un éxito aquí, simplemente, sus intereses andan por otros lados, pero en buenos intereses eso sí.


Así que aquí estoy yo. Sin nadie que me apañe, y sin saber con certeza cuantos lectores tengo a estas alturas. Pero no me malentiendan, no estoy quejándome; disfruto de estar solo y de que nadie me ande diciendo que colores poner, el largo de las entradas o cosas así.

Eso. Me gusta salirme a veces del estilo tradicional de un blog cualquiera. Lo que está de moda no es siempre lo mejor. Bueno, un saludo especial para mi amigo Nickolás Jurado: Un gran abrazo, hermano de pocos días: Puede costar ser apartado, pero se puede... ¡Sí se puede!

David Rodríguez

5.7.08

¿Proscrito?, Sí. Pero vivo.

Bueno. Después de un buen trecho sin escribir, en el que estoy casi seguro de que no me extrañaron, vuelvo a comenzar un nuevo texto. Pasé todo Junio, el mes de mi cumpleaños, sin escribir; y ahora espero retornar con un aire renovado y más relajado.

En los últimos días he comenzado a escribir un texto que espero me lleve a alguna parte. Aún no puedo adelantarles nada, pero cuando la termine espero publicarla, pues veo que tiene futuro.

En el último tiempo he aprendido a reservarme para mi alguna cosas que es mejor que no se ventilen. También que debo ser como soy sin intentar encajar con el prototipo de joven chileno, pero sin ser orgulloso diciendo "Así soy yo y nadie me cambia". El secreto es ser adaptable pero sin transar.

Probablemente mi manera tan positiva de escribir en este momento, no refleje el como me siento por dentro, pues estoy destrozado. Podríamos decir que me escapé de todo. Ahora quizá me castiguen sin ir a MOU. Por favor, quien quiera que seas, ora para que pueda ir aunque no me lo merezca. Eso es gracia.

Ahora estoy sentado en una pequeña salita en mi iglesia con un notebook en las piernas. Son la 3:40 AM y no tengo sueño. Mi mejor amigo, Roy V.D.W., está durmiendo en el piso tapado con un delgada frazada a menos de un metro de mí y una guitarra a su lado mira como pidiendo música. Esta es una noche muy fría y nuestra única fuente de calor son dos viejas estufas dispuestas una a dos metros de la otra.

Mañana (hoydía mejor dicho) es la reunión de MOU en Encuentro con Cristo Plaza Egaña, la iglesia que me vió nacer. Y dicho sea de paso, si vas a ir MOU, ya sea el de Las Condes, La Florida o Maipú; es importante que vayas mañana (osea hoy). Es a la 10:00 AM en la iglesia que dije, Metro Estación Plaza Egaña.

Y para terminar quiero agradecer a mi amigo Roy por apañarme a pesar de que soy un estúpido. Si yo no fuera yo y llegara un tipo en mi situación a pedirme ayuda, no estoy tan seguro de si le acompañaría como me acompaña este compadre. Así que, y aunque probablemente él nunca lea esto, muchas gracias por apoyarme en todas, hermano.

Ahora tengo otro problema más... Como no tuve un tema específico, no se como ponerle de título a esta cosa. Bueno, algo se me ocurrirá de aquí a las 8 de la mañana cuando llegue la gente a trabajar.

Gracias por leer tanta tontera. Esta entrada está dedicada para ti, amigo o amiga, que llegaste hasta el final. Chaoooo..

David Rodríguez

24.5.08

No tienes idea con quien te metiste...

Venía hacia mi casa como cualquier viernes después del ensayo de la iglesia. Me subí a la micro e iba parado cuando el tipo de al lado me empezó a conversar. Tendría uno diecisiete años, alto, delgado, el pelo color óxido, y manos bastante grandes que no armonizaban con el resto de su cuerpo. Vestía un bluejeans bastante desteñido, un chaleco anaranjado con rayas rojas dispuestas horizontalmente y unas zapatillas comúnes y corrientes.

En cuanto empezó ha hablar dejó en clara evidencia que había estado usando marihuana; se notaba también que sus efectos ya estaban pasando y eso le producía bastante malestar. Me hizo preguntas sobre donde vivia, hacia donde iba, que cosas hacia, hasta me preguntó mi fecha de cumpleaños; preguntas que yo, porsupuesto, evadí contestándole incoherencias que para su estado daban lo mismo. Pequé de ingenuo al pensar que era solo un vola'o cualquiera.

Ibamos por José Arrieta cuando me preguntó donde me bajaba. "En Los Molineros", le dije. Él me había dicho que se bajaba en Ictinos, dos paraderos más allá; así que iba a hacer todo lo posible por alejarme de el. Caminé hacia la puerta, y cuando vi que me siguió, me di cuenta de lo que tramaba. Cruzó la calle conmigo y me siguió hablando. Pensé en correr rápido hasta mi casa, pero temía que me siguiera y viera donde vivo. Caminé en dirección contraria a la de mi casa, sabiendo lo que me esperaba. Me dijo "Tengo ganas de pegarle alguien, ¿Que pasa si te pego a vo'?"; "Pero como me vay a pegar" le respondí "Si somos amigos, ¿o no?"; "Es que yo tengo la media cuchilla aquí en la guata, y te quiero quitar las cosas" me dijo "¡Pásame el celular!"...

Alguien podrá pensar que fui tonto, pero me lo saqué del bolsillo y se lo entregué. Lo que más me dolió fueron las grabaciones y los contactos que tenía ahí guardados.

"¿Qué más tení'?" me preguntó "A ver, pásame la billetera". Dudé por algunos instantes; mi billetera tiene cosas de un valor sentimental tremendo, aparte de mi carnét, el certificado que uso mientras no saco el pase, la constancia de Carabineros de que se me perdió el pase, una uñeta y un juego de Marienbad... la verdad es que a billetera tenía solo cien pesos. Así que me armé de valor, saqué la billetera de mi bolsillo y la tiré a la casa que estaba al frente; el tipo me miro sorprendido, probablemente no muchos de los que asalta se atreven a tirar las cosas, sabiendo que el tiene un cuchillo y que además ya les quitó algo. Me dijo que me fuera, y yo partí corriendo lo más rápido que pude hasta mi casa.

Cuando a uno lo asaltan, más allá del hecho de que te hayan quitado mucho o poco, es la impotencia la que lo carcome a uno. Es como un dolor en el estómago, mezclado con rabia, ganas de llorar y mil cosas que se te pasan por la cabeza. "¿Y si hubiera corrido antes?" ¿Y si hubiera esperado la siguiente micro?" ¿Y si hubiera tirado también el celular junto con la billetera?". Porque esa billetera la voy a recuperar mañana cuando la vaya a pedir. El tipo salió corriendo también en dirección contraria cuando me dijo que me fuera.

La verdad es que podría estar mucho peor ahora, después de todo esto me pasó hace solo dos horas. Pero pienso que el no tiene idea con quien se metió. Porque yo no estoy solo; tengo un Dios que me cuida y que es siempre justo. Él me protegió de que me pasara cualquier cosa a mí, después de todo, es solo un celular, y mi billetera se salvó.

Estoy tranquilo, Él hará justicia por mí. Cuando llegué a mi casa me encerré en el baño y simplemente adoré; adoré hasta más no poder. Y tengo la certeza, estoy completamente seguro, de que esto, así como todo, no es más que un incomprensible fragmento del maravilloso y complejo plan que mi Dios tiene para mí.

Mi Dios es tan fuerte, grande, tierno y poderoso,
Y no hay nada que Él no pueda hacer!!!!!!!

David Rodríguez

12.5.08

¿Cómo limón en la herida?

Comentarios ácidos... comentarios que se me vienen a la mente sin quererlo yo. Pequeñas e hirientes frases, que calan muy profundo, y que tienen poder para destruir hasta la persona más segura. Son como pequeñas cuchillas, y se me ocurren cada vez que converso o me molesto con alguien. Y son tan precisas y crueles, que parecen haber sido muy bien pensadas por alguien lleno de veneno en el corazón.

El verdadero problema, es que por lo general, no me aguanto el no decirlas, y eso trae consecuencias de las que después termino muy arrepentido... pero la palabra dicha, ya no se puede recoger. Se me ocurren siempre contra las personas que más quiero; y como se bastante sobre esas personas, tengo material suficiene como para, inconscientemente, componer las frases más desgraciadas y perversas, que jamás diría si me lograra contener y detenerme un momento a pensarlas y darme cuenta de lo que verdaderamente estoy diciendo.

Antes, me enorgullecía de poder confeccionar frases tan ingeniosas. Hasta consideraba que eran "como limón en la herida", pero más que confrontar y desinfectar, lo que hacía era maldecir y humillar. Luego de una larga conversación que tuve con el director de mi colegio, al que me gusta ver como mi amigo (no lo digo por patero, de todos modos, probablemente el nunca lea esto), comprendí que las cosas que uno hace, trascienden el simple hecho de hacerlas; me di cuenta que esas cosas que nacían en mí, eran simplemente el fruto de heridas, temores y odios que había en mi corazón.

Así que comenzó una tiempo de sanarme. Y el único que puede sanar completamente; y quebrantar lo más escondido de nuestro ser; y llegar a la esencialidad de las cosas; y no solo adornar lo externo, es Jesús.

Bueno... el camino suele ser largo y difícil. Pero el final es lo mejor. El proceso de sanidad que Dios opera en nosotros es un servicio con todo incluido. Y es maravilloso, nada te renueva tanto. Y simplemente porque Él te conoce tanto, y sabe cada cosa que has pasado y todo lo que has sentido en cada momento y en cada situación.

Y el proceso continúa. Me siguen surgiendo estas frases ácidas, pero ya no las digo. Porque sé que el dolor que causan puede llegar a ser incluso, el empujón que necesita una persona para acabar con su vida.

Y así Jesús me va sanando, con este limón en la herida, que quema... pero purifica.

David Rodríguez

18.4.08

Una vida en pos de nada

Estoy chato. Estoy chato del colegio; de vivir para estudiar, trabajar y producir.

Cuando la vida empieza, uno va a un jardín infantil para aprender las cosas más básicas, para luego entrar al colegio. En el colegio, hay que sacarse buenas notas para poder entrar a la universidad. En la universidad, hay que matarse estudiando para conseguir un título, para luego trabajar... trabajar y luego jubilarse. Cuando uno ya se ha jubilado, recibe una mugre de pensión, con la que se supone, se deben pagar todas las necesidades que hayan. Luego uno se muere, y a nadie le va a importar cuantas noches las hayamos pasado en vela estudiando, o cuantas horas extras hayamos trabajado.

Con la jornada completa, uno sale más tarde del colegio. Y entrando a las 8:00 AM y saliendo a las 5:00 PM, ¿creen acaso los ineptos de mi colegio, que uno tiene muchas ganas de llegar a la casa con el saco de tareas, los versículos para memorizar, el tener que estudiar para las pruebas, los trabajos, los libros que hay que leer?

La vida no se hizo solo para estudiar y trabajar. Tarea en la semana... ¿Cuándo se descansa?; Tarea el fin de semana... ¿Cuándo se juega?; Memorizar el pasaje del mes, el versìculo de cada guía, y los rasgos del carácter... ¿Cuándo me relajo y estoy con mi familia?; Usar solo azul marino... ¿No creó acaso Dios muchos colores?


"No hay fin de hacer tantos libros,

y el mucho estudio es fatiga de la carne"
Eclesiatés 11:12

No quiero pasarme la vida siguiendo un modelo que te obliga a convertir tu vida en monótono y aburrido camino. Porque, sinceramente, prefiero morirme antes de ver mi vida desperdiciada, habiendo dejando de lado las cosas que amaba, por convertirme en un profesional con título y exitoso.

"¡No sois máquinas! ¡Hombres es lo que sois!"
Charles Chaplin - El Gran Dictador

David Rodríguez

7.4.08

¿Autoridad sin Autoridad?

Y ahí está la autoridad.

Mala onda, incomprensiva, irracional, insoportable, inconsecuente, y sin liderazgo verdadero (aparte del que su posición les otorga)... pero autoridad al fin y al cabo.

Me acuerdo que en mis tiempos de idealista, comenzé a escribir los primeros apuntes de lo que se convertiría en uno de mis pocos ensayos que logré concluir. Se llamaba "La Autoridad sin Autoridad". Actualmente no estoy de acuerdo con todo lo que alguna vez creí a pie juntillas; pero siempre hay algo de rescatable en las cosas.

Uno de los puntos que más recalcaba era el que autoridad es algo que es entregado a alguien para que la ejerza de forma responsable, consecuente, constante y realista. Y que los gobernados , por el bien del estado, tienen completo derecho a abolir a esa autoridad en caso de que esta no cumpla con sus obligaciones.

También insistía en que a pesar de las autoridades asignadas, los gobernados tienen el derecho de buscar sus propios líderes que los representen. Creando así un cuadro de autoridades asignadas y un pueblo obedeciéndole (mientras las órdenes no vayan en perjuicio del estado); pero con un líder (algo así como un caudillo) que aboga y lucha por los interéses de la mayoría, y aún a costa de su integridad y libertad. Todo esto con el fin de proteger a la mayoría, y con solo una persona, que resulta como chivo expiatorio.

Lo cierto es que este modelo es bastante quimeral, pero fue mi ideal desde 4° a 7° Básico.

Seguí pensando así hasta que el año pasado me enfrenté cara a cara con un trozo de la Biblia (Romanos 13:1-5) que me dejó helado y me dio vuelta toda mi forma de ver las cosas. Fue para mí toda una lucha interna el aceptar que la autoridad, al estar puesta por Dios, era digna de mi respeto y obediencia. Estaba demasiado acostumbrado a ser visto como uno de los pocos que se resistían, y no solo resisir, sino también conseguir cosas y lograr cambios importantes en las reglas abusivas.

Y aún me es una lucha, una lucha diaria y de la que no siempre salgo airoso. Callar, someterse y morderse la lengua, cuesta mucho... muchísimo. Sobretodo cuando uno está conectado a un barril de polvora que al mínimo chispazo, explota.

Pero bueno, yo sé que no puedo solo. Hasta ahora no he podido solo. Así que tengo más que claro que la única forma de aplacar mi corazón, pero sin apagar el fuego salvaje de mi corazón, es buscando a Dios... así es.

Pues más allá de todos los ensayos, procesos doctrinales, canones y códigos que pude haber escrito; Dios es el único que tiene la verdad.

Por muy difícil que sea... tengo un Dios de Restauración.

David Rodríguez

3.3.08

Yo no pololeo

Hace más o menos un año decidí no pololear. Pero había sido una decisión que tomé por pensar que era lo correcto, más que por una convicción y un gran deseo de no hacerlo.

No voy pololear hasta que tenga 18... y francamente me da lo mismo lo que puedan opinar los demás. No caben en mi mente como una opción ser amigo especial, pololo, amigo con ventaja, con cover, etc. Y no digo que sea fácil, porque no lo es para nada, pero al primer pensamiento de que me estoy enamorando, rechazo de inmediato todo eso, lo saco de mi mente y me recuerdo que mi primer objetivo es mantenerme integro y libre de dañar a otra persona... no estoy listo para pololear.

La verdad, creo que al tener una relación, los corazones de van entretejiendo y al separarse siempre va a haber dolor; y por la inmadurez de esta edad, por lo general, casi nunca una relación a los 15 años termina en matrimonio.

Mi prioridad, como dije, es mantenerme integro. Y para lograr eso simplemente tomé la decisión, con una firme e inquebrantable convicción de que aún no es el tiempo. Prefiero ahora tener amigos, conocer gente y disfrutar la vida tal y como es ahora... mientras dure esta etapa de mi vida... solo quiero buscar a Dios... porque Él es el mejor amor... mi primer amor.


David Rodríguez